Porque no me gustan los finales, por muy felices que sean, y porque siempre existe un prometedor comienzo tras ellos, este primer día del nuevo año quiero "empezar" un cuento que ya no se escribirá en estas páginas...
Un cuento donde en la familia no aparecen malvadas madrastras, sólo la seguridad y el calor del hogar...
Un cuento donde los viejos amigos siempre se reencuentran en el camino gracias al destino...
Un cuento donde siempre existirá papel en blanco y tinta fresca para añadir nuevos nombres...
Un cuento donde existan rincones mágicos que te permitan viajar a lugares exóticos...
Un cuento donde el pueblo natal de uno de los mejores narradores de historias, Miguel de Cervantes, aún permanece dormido en su gloria medieval...
¡FELIZ AÑO Y FELIZ COMIENZO!