Cada vez hace más frío. La piel se agrieta y los músculos de la cara se congelan, haciendo difícil incluso el habla. La capital del Reino del Gran Dragón se somete al hielo y sus hijos aguardan impacientes la llegada de un nuevo año vestido de rojo y con forma de pequeña rata.
Los guerreros comienzan a preparar la llegada de amigos y familiares, y acudimos a las caballerizas en busca de rápidos corceles que recorran veloces un Reino demasiado grande. Sin embargo, no todo es tan fácil como parece y comprar un billete de tren o avión puede convertirse en un quebradero de cabeza, si el presupuesto no es muy alto. Los billetes de tren sólo pueden comprarse 10 días antes de la fecha de salida y, por mucho que madrugues, es probable que ya no queden cuando llegues a la ventanilla. Muchos de los agentes de viaje prefieren incluso hablar por MSN que atender a sus clientes, pues ya saben que poco se puede hacer por ellos en estas fechas...
¿Quién tuviera ahora una calabaza que convertir en carruaje?
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